En 2011 el monto superó los 350 mil millones de pesos, por concepto del plan de pensiones y primas de antigüedad, entre otros.
La empresa paraestatal Petróleos Mexicanos (Pemex) presentó un pasivo laboral en 2011 de 354 mil 989.9 millones de pesos, 12.7 por ciento más de lo que tenía en 2010, destacó el informe anual que entregó a la Cámara de Diputados.
La situación financiera de Pemex “tiene un pasivo laboral muy importante por concepto del plan de pensiones, primas de antigüedad y beneficios por terminación por razones distintas a la reestructuración”, destacó el documento.
En un comunicado, el presidente de la Comisión de Energía, Felipe de Jesús Cantú Rodríguez, consideró que es necesario transparentar los recursos que se destinan a los sindicatos.
Esa propuesta, recordó el diputado del Partido Acción Nacional (PAN), fue integrada en la Reforma Laboral para que sea posible medir el resultado de los trabajadores.
“El propio Pemex debe considerar el apapacho a los trabajadores y no a los que no los son o a la élite de los sindicatos, porque hay quienes no son empleados, pero están registrados como tal. Se debe medir la eficiencia, eficacia y resultados de los trabajadores”, remarcó.
El informe anual de Pemex indicó que con el fin de apoyar el crecimiento de esa empresa pública, se requiere la participación de empresas privadas y aplicar la Ley de Asociaciones Público Privadas.
Lo anterior para que no sólo se dé la extracción de crudo, sino que se pueda industrializar, transformar la materia prima y no depender de productos que vienen de otros países y mejorar su capacidad de liquidez, aseveró.
Otro rubro que se debe resaltar es la estrategia relevante para Pemex-Exploración y Producción (PEP) que han sido los contratos incentivados y que se espera contribuyan positivamente a la estrategia de exploración y explotación de hidrocarburos, resaltó Cantú Rodríguez.
Por ello, adelantó el legislador panista, a mediados de 2012 habrá una ronda de licitaciones que habrán de adjudicarse para campos maduros en la región norte del país.
Fuente: La Razón
