martes, 17 de abril de 2012

Cristina Fernández nacionaliza el petróleo argentino. Historia de la petrolera y cronología del conflicto

La empresa YPF es de toda la nación; que esté claro

El manejo que tenía la española Repsol causó la caída en la producción

La expropiación busca dar al país libertad sobre su política energética

Envía el proyecto al Congreso; dan por hecha su rápida aprobación
Tras el anuncio de expropiación de YPF a Repsol, el gobierno de España amaga con represalias

La presidenta Cristina Fernández busca el autoabastecimiento de energéticos

Buenos Aires. Argentina intervino la petrolera YPF y buscará expropiar 51 por ciento de la empresa, controlada por la española Repsol, decisión que acentúa la presencia estatal en la economía y disparó un conflicto con Madrid, que amenazó con represalias.

La presidenta argentina, Cristina Fernández, anunció entre aplausos que enviará al Congreso un proyecto para expropiar la mayoría de YPF, la empresa más grande del país, a la que culpa por una caída en la producción de hidrocarburos que obliga a realizar importaciones y erosiona el superávit comercial.

YPF es de todos, quiero que lo tengamos muy claro, dijo Fernández en un discurso por cadena nacional. Según legisladores y gobernadores, el Congreso aprobaría rápidamente la propuesta, que Fernández dijo que busca dar al país libertad para decidir su política energética y recuperar un perdido autoabastecimiento.

Gesto hostil: Madrid

La mandataria detalló que las acciones que se buscan expropiar son exclusivamente las que tiene Repsol-YPF y no las de otros socios privados.

Tras ese anuncio, el Ejecutivo de España dijo que interpreta la decisión como un gesto hostil. El gobierno condena con absoluta energía la arbitraria decisión de Argentina de expropiar las acciones de Repsol en YPF, dijo el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo, tras una reunión de urgencia con el presidente Mariano Rajoy. Habrá consecuencias, agregó.

Previamente Fernández dijo que no respondería lo que calificó de amenazas hechas desde España. “Esta presidenta no va a contestar ninguna amenaza, no va a responder ningún exabrupto, no se va a hacer eco de la falta de respeto ni de frases insolentes, porque represento a los argentinos; soy una jefa de Estado, no una patotera (matona)”, aseveró.

Repsol-YPF tiene 57.4 por ciento de YPF, mientras el Grupo Petersen, el mayor accionista local, perteneciente a la familia Eskenazi, posee 25.4.

La firma española dijo que considera ilícita la decisión tomada por Fernández y que la combatirá legalmente, lo que indicaría que el conflicto podría terminar en otra demanda contra Argentina en el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones, del Banco Mundial.

La Unión Europea (UE), segundo mercado de exportación para Argentina, también reaccionó rápidamente.

Una toma de control forzada por parte del gobierno argentino será una señal muy negativa para los inversores nacionales e internacionales, y podría dañar seriamente el ambiente de negocios en Argentina, dijo el portavoz de comercio de la UE, John Clancy.

Carlos Bastos, experto en el sector energético local, aseguró que la medida ahuyentará las millonarias y muy necesarias inversiones para desarrollar el megayacimiento argentino Vaca Muerta, con enormes recursos de hidrocarburos no convencionales. No creo que haya ninguna inversión de riesgo que esté dispuesta a invertir en el país, apuntó.

El proyecto de ley comenzará a ser analizado el martes en el Congreso argentino, coincidieron los legisladores oficialistas Aníbal Fernández y Agustín Rossi.

Merma bursátil

En Buenos Aires los títulos de YPF cayeron 2.43 por ciento antes de ser cancelada su operatoria. La suma de todos los males por una estatización se consumaron y esto cambia rotundamente la tendencia de la acción, dijo Marcelo Paccione, analista de Consult Capital Sociedad de Bolsa.

La capitalización total actual de YPF es de unos 46 mil 765 millones de pesos, o 10 mil 640 millones de dólares al tipo de cambio oficial, según datos de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires.

La firma ha perdido más de 4 mil millones de dólares de valor de mercado en lo que va del año. La ley de expropiación de Argentina prevé, como primera instancia, un acuerdo entre las partes sobre el valor a pagar.

Sin un acuerdo, se avanza a un proceso judicial en el que un magistrado pide a un tribunal que fije el precio de la transacción. Goldman Sachs dijo en un informe que no está claro cuánto pagará el gobierno por el 51 por ciento de YPF y si el resto de sus accionistas estarían dispuestos a continuar como minoritarios.

Los bonos de la deuda soberana de Argentina aceleraron su caída tras el anuncio.

La noticia (de YPF) sensibilizó a todo el mercado y se notó muy claramente en los bonos con fuertes bajas, como se reflejó con el riesgo país, sintetizó un operador de la banca privada.

Frente a la andanada de anuncios, el riesgo país argentino medido por el banco JPMorgan subió a su nivel más alto desde finales de noviembre.

Fundada en 1922, YPF fue parcialmente privatizada en 1992, tras años de reportar pérdidas debido a que usualmente tenía que financiar al Tesoro.

Durante parte de su historia como empresa estatal, YPF fue conducida con fuerte interferencia política. Fernández indicó que la futura conducción estatal de YPF será completamente profesional. En la opinión de Fitch, que el lunes redujo la calificación de la petrolera en moneda local, el control por parte del gobierno llevaría a mayores ineficiencias y menor utilidad, dado que las empresas estatales tienden a incorporar estrategias más sociales que empresarias.

Un ejemplo regional es PDVSA, la petrolera estatal venezolana, que debe financiar constantemente los planes sociales del presidente Hugo Chávez. La brasileña Petrobras tiene mejor imagen entre los inversionistas por una mayor transparencia de sus finanzas al cotizar en bolsa, aunque también es criticada por la fuerte intervención del gobierno en su estrategia.

Las necesidades energéticas de Argentina han sido una bomba de tiempo desde hace años, pero para el gobierno se volvieron prioritarias recientemente debido a que el creciente costo de importación de combustible está erosionando el preciado superávit comercial.

Argentina, aún sin acceso a los mercados internacionales de crédito tras una cesación de pagos en 2001, tiene en su superávit comercial una de las pocas fuentes de divisas.

La producción de crudo cayó 5.9 por ciento y la de gas natural 3.4 el año pasado, cuando la demanda energética creció 5.1 por ciento, según datos del Instituto Argentino de Petróleo y Gas. La importación de alternativas más caras, como gas natural licuado (GNL) y diesel, creció más del doble en 2011, a unos 9 mil 300 millones de dólares.

Críticas en EU y GB

En tanto, Daniel Volberg, economista de Morgan Stanley, advirtió en un reporte a clientes que el conflicto del petróleo es simplemente un aspecto de lo que llamó la posible radicalización de la política del gobierno argentino, que ha estatizado empresas como Aerolíneas Argentinas, los fondos privados de pensiones y la mayor distribuidora local de aguas, entre otras compañías.

Según la consultora Capital Economics, con sede en Londres, la decisión argentina pone en evidencia la estrechez de su modelo económico, caracterizado por un alto crecimiento impulsado por el consumo, subsidios y controles de precios.

Esas políticas ya han obligado al país a imponer restricciones en el mercado cambiario y a las importaciones para cuidar el superávit comercial, afirmó.

Vemos esto (el proyecto de expropiación) como una negativa perspectiva (ya pobre) para la inversión de largo plazo y creemos que podría esparcir una retirada parcial de inversores extranjeros de otros sectores.

Fuente: La Jornada

Historia de la petrolera y cronología del conflicto
La empresa era estatal
En 1992 se inició su privatización
Buenos Aires. La historia hidrocarburífera de Argentina tiene como puntal a Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF), empresa fundada en 1922 y privatizada en 1992, que la presidenta Cristina Kirchner busca recuperar con un proyecto de ley para controlar 51 por ciento de las acciones.

– 1907: Se descubre el primer pozo

– 1922: Se crea la empresa estatal y se nombra director de YPF a Enrique Mosconi, militar e ingeniero, pionero en la exploración y producción de crudo e ideólogo de la creación de la compañía, que permaneció ocho años en el cargo.

– 1925: Crece la firma al construirse la refinería de La Plata, 60 kilómetros al sur, y así llega a ser una de las más grandes del mundo en términos de capacidad.

– 1947: El presidente Juan Perón aplica una política desarrollista y nacionalista en la firma. Entre 1940 y 1970 la producción se multiplica siete veces y la de gas 14 veces.

– 1955: Pese a su postura, Perón firma un contrato con la empresa Standard Oil de California para explorar petróleo, pero luego de su derrocamiento el contrato no se cumple.

– 1958: El presidente Arturo Frondizi, quien apoyaba el monopolio estatal, emprende un programa de inversiones privadas para extraer crudo y lograr autoabastecimiento.

– 1963: El presidente Arturo Illia anula los contratos petroleros por considerarlos lesivos.

– 1976: La última dictadura deja sumida a la empresa en una crisis financiera.

– 1992: El presidente Carlos Menem inicia el proceso de privatización con una ley. El plan se completa en 1999, cuando Repsol pasa a controlar la totalidad de la compañía tras una operación de compra por un valor de unos 15 mil millones de dólares.

– 2000: Repsol-YPF emplea a 5 mil 500 personas y posee 46 por ciento del mercado de combustibles.

– 2007: El grupo argentino Petersen, encabezado por Enrique Eskenazi, compra 14.9 por ciento del paquete accionario por iniciativa del presidente Néstor Kirchner.

– 2011: El grupo Petersen aumenta su participación accionaria en la compañía en 10 por ciento y pasa a poseer 25.4 por ciento de YPF.

– Enero de 2012: El gobierno denuncia a Repsol-YPF y otras cuatro petroleras por posición dominante. Kirchner reclama a las petroleras reinvertir ganancias en el país para aumentar producción y bajar importaciones.

– 6 febrero: El presidente de Repsol, Antoni Brufau, defiende el monto de las inversiones, de 3 mil millones de dólares.

– 23 febrero: Funcionarios del gobierno intentan participar en una reunión de directorio, pero no se les permite. Brufau denuncia que la compañía es objeto de algunas críticas injustas que incluyen amenazas de sanciones o restricciones con dudoso fundamento legal.

– 14 marzo: La provincia de Chubut quita la concesión de áreas de explotación a la compañía con el argumento de falta de inversión. Comienza aquí un rosario de pérdidas que llegan a un total de 16 áreas en seis provincias.

– 23 marzo: La agencia de calificación crediticia Fitch rebaja un escalón, a BBB, la nota a largo plazo de la petrolera, en medio del conflicto con el gobierno argentino.

– 12 abril: El ministro de Industria español, José Manuel Soria, advierte que la hostilidad contra intereses de empresas españolas es interpretada como hostilidad a España y dice que conlleva consecuencias.

– 16 de abril: La presidenta Cristina Kirchner anuncia el envío al Congreso de un proyecto de ley para expropiar 51 por ciento de acciones de la compañía y pasar a controlarla para recuperar el autoabastecimiento de combustibles.




Fuente: La Jornada