miércoles, 23 de mayo de 2012

Evaden candidatos la reforma laboral

Mientras que la desocupación afecta a 8 millones de personas, López Obrador se niega a actualizar la Ley del Trabajo y Peña Nieto solo dice que analiza el tema.

Los candidatos presidenciales Andrés Manuel López Obrador, de las izquierdas, y Enrique Peña Nieto, de PRI-PVEM, evaden el tema de la reforma laboral, aseguró Alberto Espinoza Desigaud, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).

López Obrador se niega a integrar cambios propuestos por los empresarios, y Peña Nieto no da respuesta concreta al sector, bajo el argumento de seguir analizando el tema, y en sus discursos no detalla cómo mejorar la situación de los trabajadores.

El dirigente de la Coparmex habló de la necesidad de crear un marco jurídico que responda a las expectativas y necesidades del empleo en todos los sectores, como salarios bien remunerados dentro de la economía formal.

“Es importante ampliar las posibilidades de contratación por temporada o periodos de prueba, abriendo oportunidades a las mujeres y jóvenes que trabajan en condiciones precarias”, abundó

López Obrador ha destacado la reducción del número de puestos públicos, incluso de bajar el salario de los funcionarios, “pero no ha dicho nada sobre horarios flexibles o cubrir huecos que permitan el crecimiento económico”,indicó.

Además de negarse a modificar una ley laboral que tiene más de 40 años y es completamente obsoleta, mientras que en otros países se ha transformado a la realidad actual.

Recordó que entre 1995 y 2011 se acumuló un rezago de más de 8 millones de plazas laborales; además de que la tasa de desempleo es de 5.2 por ciento y entre los jóvenes aumenta a 9.6 por ciento.

Enrique Peña Nieto no ha dicho nada relacionado con este tema, solo ha tratado algunos puntos, sin detallar a profundidad sus propuestas y de cómo lograrlo.

“Los temas analizados son flexibilidad de horarios, sistema de seguridad laboral y certidumbre jurídica, la figura del aprendiz y todo lo que corresponde a profesionalización de los sistemas laborales”, detalló Espinoza Desigaud.

El dirigente de la Coparmex comentó que tenían programada una reunión con el aspirante del tricolor para este miércoles por la tarde; sin embargo, canceló argumentando cambios en su agenda, sin que hasta el momento se concrete una fecha para discutir los temas laborales.

Cuando se logre concretar el encuentro, dijo, lo fundamental será que argumente los puntos necesarios y llegue a comprometerse no solo con la Coparmex, sino con la sociedad en general.

“Nosotros estamos dispuestos a escuchar las posturas de cada uno, acordando puntos que permitan un desarrollo de la economía más sustentable, pero no seremos flexibles, porque se trata de la agenda empresarial y social del país”, reiteró.

El empresario criticó que los candidatos a la Presidencia de la República han agotado más de la mitad de sus campañas electorales, sin que existan propuestas claras sobre el rumbo de la economía hacia los próximos años.

Sector de energía

En su mensaje semanal, Alberto Espinoza se pronunció por modificar el artículo 27 constitucional y sus leyes reglamentarias, a fin de permitir la inversión privada en Petróleos Mexicanos y colocar un porcentaje accionario de la paraestatal en la Bolsa Mexicana de Valores.

Consideró positivo permitir la inversión privada donde se requiere, debe haber un acuerdo nacional que modifique la ley en cuestión, pero con la premisa de que el Estado seguirá manteniendo el control y la propiedad pública del recurso, elevando la rentabilidad y manejándose con transparencia.

Apuntó que esto no significa privatizar la paraestatal, como lo afirma López Obrador, porque el sector busca proteger la soberanía del país apoyando el desarrollo de la paraestatal con capital de las empresas.

“No necesitamos cinco refinerías, con inversión de 9 mil millones de dólares en cada una, requerimos utilizar la capacidad ociosa de las plantas ubicadas en la frontera con EU con capital privado, y los recursos sobrantes dedicarlos al apoyo de programas sociales.






Fuente: Milenio