viernes, 31 de agosto de 2012

Centrales obreras priístas impulsarán nueva iniciativa para la reforma laboral


Buscarán que ya no se erosione más el ingreso de los trabajadores, dicen

Los proyectos de reforma laboral presentados en la pasada legislatura tanto por el PRI como por el PAN se harán a un lado y se construirá una nueva iniciativa que no ataque los derechos fundamentales de los trabajadores y que no vaya contra la contratación colectiva y no busque empobrecer más al sector obrero.

Los diputados del Partido Revolucionario Institucional buscarán conformar un nuevo proyecto de reforma laboral que sea consensuado y que se someta a discusión y análisis, aseguró en conferencia el secretario de acción política de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) Francisco Salgado.

El también diputado aseguró que esta central de ninguna forma permitirá que se retomen las iniciativas laborales que quedaron estancadas en el Congreso de la Unión, y buscará que se camine hacia una reforma diferente de las anteriores. Éstas, dijo, no tienen futuro, porque buscan dar más beneficios a los empresarios y acabar con las conquistas de los trabajadores. Definitivamente quedarán en proyecto, afirmó.

Planteó que no van a pedir un aumento de emergencia, pero que sí buscarán una reforma que ya no erosione el ingreso de los trabajadores, incluso en la reforma fiscal se buscarán caminos para reducir la carga tributaria al sector obrero, ya que no es justo que paguen incluso impuestos por las mermadas utilidades, sus aguinaldos o las vacaciones.

El líder del la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), y también diputado, Isaías González Cuevas, confirmó que la fracción priísta se sumará decididamente a la búsqueda de los consensos necesarios para impulsar una reforma laboral moderna, que simultáneamente responda a los cambios profundos de la economía y preserve y haga respetar los derechos de los trabajadores.

Dijo que el nuevo proyecto de reforma tendrá que considerar la regulación de la subcontratación, para evitar que sea aplicada en perjuicio de los trabajadores, y contemplar un nuevo concepto de salario integrado por productividad.




Fuente: La Jornada