jueves, 23 de agosto de 2012

Presenta Ricardo Monreal el ‘Libro Negro’ de las elecciones del 2012

Concluye Monreal "libro negro" de las elecciones

En la publicación da cuenta de las “irregularidades cometidas por el PRI y Enrique Peña Nieto”.

Ricardo Monreal, coordinador de campaña de Andrés Manuel López Obrador, concluyó el “libro negro” de las elecciones presidenciales, donde da cuenta de las irregularidades cometidas por el PRI y su candidato presidencial, Enrique Peña Nieto.

“Utilizando un símil de los juegos olímpicos”, afirma en el texto de 48 páginas, que “Enrique Peña Nieto corrió dopado bajo los efectos de una sustancia expresamente prohibida por la legislación electoral, el dinero en efectivo y en especie, cuya sobredosis afectó la naturaleza, el diseño y el desarrollo de la competencia política.

“Por lo tanto, la carrera debe invalidarse y reponerse bajo las condiciones y normas que establece la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y la legislación electoral”.

Monreal explica que la publicación busca poner en manos de los ciudadanos las pruebas y argumentos que sustentan la impugnación del Movimiento Progresista, el cual estima en 4 mil 600 millones de pesos el gasto electoral del candidato del PRI, cuando el límite legal establecido fue de 336 millones.

Reitera que la elección presidencial estuvo muy alejada de la equidad democrática. “El dinero a raudales, de procedencia desconocida y al margen de toda fiscalización se convirtió en esta ocasión en la partícula del fraude y el abuso electoral”.

El dinero ilegal e ilícito “es inocultable, el derroche es su principal expresión” y menciona como pruebas: la utilización de una flotilla aérea imperial compuesta por aviones y helicópteros llevados al servicio del candidato del PRI; la utilización masiva de espectaculares, vallas y anuncios publicitarios”.

También, “la distribución de millones de utilitarios de diversa índole, desde las clásicas camisetas y gorras, hasta la entrega de aparatos electrodomésticos, pasando por millones de tarjetas telefónicas prepagadas y entrega de animales de crianza en las zonas rurales.

“Y de manera insólita, la utilización masiva de monederos electrónicos de Monex y de Soriana. Todo ello fue la expresión más acabada de una campaña electoral que pudo adolecer de algunos atributos políticos como el pudor, la moderación y la imaginación, pero no del dinero en efectivo y en especie como eje articulador o sello distintivo”.

Fuente: La Jornada