martes, 23 de octubre de 2012

Sindicatos oficialistas se unen con el SME en la lucha contra la reforma laboral

Organizaciones afiliadas al Congreso del Trabajo se dicen traicionadas por el PRI

Acuerdan iniciar acciones legales, además de realizar una movilización el jueves ante el Senado

También prevén acudir a instancias internacionales y no descartan llevar a cabo un paro general

Organizaciones afiliadas al Congreso del Trabajo (CT), como las confederaciones Obrera Revolucionaria (COR), Regional Obrero Mexicana (CROM) y la de Obreros, Campesinos y Empleados de México (Cocem), se dijeron traicionadas por los legisladores del Partido Revolucionario Institucional (PRI) que aprobaron la reforma laboral, y junto con el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) acordaron iniciar acciones legales contra esta iniciativa y realizar una movilización ante el Senado el próximo jueves.

Incluso, las organizaciones prevén la posibilidad de interponer amparos ante instancias del Poder Judicial de la Federación contra esta reforma, porque es ilegal, e iniciar procesos ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), así como llevar a cabo un paro general el próximo 20 de noviembre, según acordaron en una reunión en la que también estuvieron presentes los dirigentes del Congreso Laboral del estado de México y de la Confederación Regional de Obreros y Campesinos (CROC), entre otros.

Del mismo modo anunciaron que participarán en una asamblea general que tiene por finalidad construir un frente nacional de unidad sindical y que se llevará a cabo el próximo 31 de octubre en el SME.

Sostuvieron que la parte de esta reforma que supuestamente tiene que ver con la democratización de los sindicatos y la rendición de cuentas es una cortina de humo para imponer esta iniciativa laboral que depauperizará a los trabajadores actuales y futuros del país.

Los senadores de plano nos ignoraron

Rodolfo Guzmán, dirigente de la CROM, apuntó que el Congreso del Trabajo y la Confederación de Trabajadores de México (CTM) presentaron un escrito a los senadores para que no se aprobara un reforma que afecta a los trabajadores de todo el país, pero los legisladores ignoraron esta petición.

A su vez, el líder de la CROC indicó que aun cuando se apruebe esta iniciativa en el Congreso de la Unión, las organizaciones obreras acudirán a la vía legal para buscar frenarla, por lo que se presentarán amparos judiciales, ya que la reforma preferente carece de reglamento y aun así se impuso.

Por su parte, el líder de la COR, Reyes Soberanes, planteó que el próximo 31 de octubre estas organizacions participarán conjuntamente en la asamblea que se llevará a cabo con miras a crear un frente único sindical, al cual se podrían sumar lo mismo organizaciones del CT que de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) para enfrentar esta reforma laboral y otras que vienen en camino y que serán igualmente perjudiciales para el país.

Indicó que hay todo un plan de acción que deberá ser aprobado por los diversos sindicatos, pero una de las medidas inmediatas es la movilización en el Senado el próximo jueves.

Martín Esparza Flores, dirigente del Sindicato Mexicano de Electricistas, señaló que dicha contrarreforma laboral está cancelando los derechos laborales a los futuros trabajadores del país. México será un país de trabajadores eventuales, mal pagados y sin seguridad social, dijo el líder y propuso un paro nacional.

Por su parte, el dirigente del Congreso Laboral del estado de México, Óscar Moreno Moreno, y José Luis Moreno Vélez, secretario general de la Cocem, sostuvieron: Hemos sido traicionados por los legisladores del PRI, quienes sin miramientos aprobaron una reforma laboral que va en contra nuestra, y aseguraron que el tema de transparencia y democracia sindical compete a los trabajadores y a sus gremios y no a terceros que quieran meter la mano en los sindicatos.

En tanto, Juan Ayala, del Sindicato de Trabajadores del Gobierno del Distrito Federal, señaló que aun cuando se apruebe la reforma en el Senado, las acciones que emprenderán van más allá, y no descartan un paro general.




Fuente: La Jornada