martes, 26 de agosto de 2014

Un artefacto explosivo es lanzado a las oficinas de un Diputado del PAN en el DF; pide “no minimizar el acto de violencia”

Un artefacto explosivo fue lanzado la noche del lunes en el Módulo de Atención Ciudadana del Diputado Orlando Anaya González del Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional (PAN) en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF). 

El explosivo causó daños a la cortinilla y paredes del inmueble ubicado en la Delegación Iztapalapa, sin que personas resultaran heridas, ya que nadie se encontraba laborando a esas horas. Anaya González consideró que el hecho es una muestra de la violencia e inseguridad que prevalece en la ciudad e hizo un llamado a las instancias competentes para encontrar al responsable. 

“Solicito el apoyo de las autoridades para encontrar al responsable y que reciba la sanción correspondiente, pues la infraestructura del local se vio dañada; además de que no se puede permitir este tipo de actos que exponen la integridad física y la vida de los ciudadanos”, señaló a través de un comunicado. 

El Diputado panista refirió que este acto de violencia no debe de minimizarse, pues a pesar de que, “afortunadamente nadie se encontraba en el módulo a la hora de los hechos, pudieron haber lesionado a alguien”. El también presidente de la Comisión de Juventud y Deporte calificó cualquier ataque o agresión como “un acto de vandalismo” que va en contra de la libertad y viola los derechos de terceros. 

Indicó que todos tienen derecho a manifestar su opinión y exigir a nuestros representantes y gobernantes rendición de cuentas, y transparencia en su gestión, pero “la violencia no es el camino para ningún propósito pues sólo se expone la integridad física de los ciudadanos y se daña el patrimonio ajeno”. 

Al lugar acudieron elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y el Cuerpo de Bomberos. 

También se presentó la denuncia correspondiente ante el Ministerio Público contra quien o quienes resulten responsables de este ilícito.

Fuente: Sin Embargo| La Redacción