jueves, 23 de octubre de 2014

Policías de Guanajuato se llevaron al estudiante de la UdeG, ratifica un testigo

Rosa María Villegas, madre de Ricardo, dijo en la conferencia de prensa en la UdeG: “Yo perdono y quiero darle las gracias a los que le quitaron la vida a mi hijo porque al menos me dieron su cuerpo para darle cristiana sepultura". Foto Arturo Campos

Guadalajara, Jal. “Yo perdono y quiero darle las gracias a los que le quitaron la vida a mi hijo porque al menos me dieron su cuerpo para darle cristiana sepultura y tener un lugar a donde llevarle una flor”, dijo Rosa María Villegas, madre de Ricardo de Jesús Esparza, estudiante de la Universidad de Guadalajara quien el domingo pasado apareció muerto en una calle de Guanajuato.

En una larga rueda de prensa convocada por la UdeG en su edificio central en Guadalajara, familiares del muchacho y maestros que dieron clases a Ricardo en la carrera de Mecatrónica donde cursaba noveno semestre, además de Daniel de León, compañero de la víctima, ratificaron la integridad del joven y pidieron esclarecer lo sucedido.

Daniel de León, quien fue el último que vio con vida a Ricardo, dijo que sí fueron policías de Guanajuato quienes se llevaron sometido al muchacho el sábado, que fueron a diferentes corporaciones policiales a preguntar por su paradero y que solo lo encontraron hasta que había fallecido.

De León declaró el miércoles en Lagos de Moreno ante el Ministerio Público enviado por el gobierno de Guanajuato a la ciudad jalisciense, donde él y Ricardo estudiaban en el campus de la UdeG.

La declaración se contrapone con la versión que la Procuraduría de Justicia de Guanajuato y la Fiscalía General de Jalisco han dado respecto a que el muchacho murió tras caer de una azotea y darse un golpe en la cabeza.

El rector de la UdeG, Tonatiuh Bravo, pidió prudencia a las autoridades de Guanajuato al difundir esta versión, que incluye que Ricardo estaba en las azoteas porque quería asaltar una casa y dijo que los 80 estudiantes de la UdeG que el fin de semana fueron junto con la víctima a Guanajuato están en disposición también de declarar cuando las autoridades del estado vecino así lo consideren oportuno.

Consideró que la versión de las autoridades de Guanajuato busca criminalizar a un joven cuya trayectoria académica y personal son contrarias a lo que hoy declaró el procurador de Guanajuato.

Afirmó que la institución que preside ha estado en contacto con autoridades de Guanajuato y ha preferido mantener un tono prudente, pero que la familia de Ricardo y Daniel recibirán todo el apoyo para que se esclarezca lo sucedido.

La madre y hermanas de Ricardo pidieron a quienes hayan sido testigos o hayan presenciado la detención en Guanajuato, a que declaren para llegar al fondo de los hechos y dar con los responsables.

UdeG exige a Guanajuato no criminalizar a testigo

Guadalajara, Jalisco. Para el rectorde la UdeG, el procurador guanajuatense desacredita el testimonio del estudiante que vio a dos policías llevarse a Ricardo Esparza Villegas, ‘Richie'

El procurador de Guanajuato, Carlos Zamarripa, intenta criminalizar al testigo principal en el caso de Ricardo de Jesús Esparza Villegas, estudiante de la Universidad de Guadalajara (UdeG) que murió el fin de semana pasado en aquella entidad bajo circunstancias poco claras, denunció el rector de la casa de estudios, Tonatiuh Bravo Padilla.

El funcionario universitario señaló que el procurador intenta desacreditar el testimonio del estudiante que vio cómo dos policías sometieron y se llevaron a Esparza Villegas.

"Ayer me llamó el gobernador (de Guanajuato) Miguel Márquez para ofrecer toda la colaboración; pero debo señalar que siguen incurriendo en lo mismo de siempre: criminalizar a la víctima y ahora también al testigo", señaló Bravo Padilla.

Comentó que en una entrevista a una televisora, el procurador Zamarripa soltó la idea de que los jóvenes estaban alcoholizados y eso "de antemano, es descalificar cualquier versión".

Según el rector, Zamarripa mintió en tres ocasiones durante esa entrevista: primero, al señalar que el rector del Centro Universitario de los Lagos había estado presente cuando los agentes ministeriales de Guanajuato fueron a tomar la declaración del testigo principal.

"Es mentira, porque los ministeriales de Guanajuato no lo permitieron", sostuvo.

Según Bravo Padilla, el procurador también acusó a la Universidad de Guadalajara de no estar colaborando con las investigaciones, pues el martes pasado los agentes ministeriales que llegaron a Jalisco no pudieron localizar al joven para registrar su versión de los hechos.

"No estuvo presente porque su domicilio familiar es en Tepatitlán y fue a su casa; además, él solicitó asesoría para saber las implicaciones de sus declaraciones y es por eso que vino aquí (a la rectoría) con el abogado general. Por eso regresó hasta las 10 de la noche a Lagos", indicó.

El rector de la UdeG aseguró, además, que Zamarripa afirmó la mañana de este jueves que el testigo se contradice, lo que -consideró- significa que el procurador de Guanajuato no está bien informado y está descalificando de antemano una declaración sin analizarla a fondo.

El testigo es Daniel de León y se presentó ante los medios la mañana de este jueves, junto al rector de la UdeG y otras autoridades universitarias; hasta ahora es la última persona que vio con vida a Ricardo y sostiene lo que declaró este miércoles ante los agentes ministeriales que lo interrogaron.

"A Ricardo lo interceptan dos policías, uno lo toma por detrás del cuello y otro del brazo, se lo llevan detenido y a mí no me dejan acercarme (...), corrí a darle la vuelta para localizar a mi amigo para ver en qué patrulla lo suben, pero desgraciadamente no pude hacerlo... esa fue la última vez que lo vi con vida", dijo el joven entre pausas, tratando de contener algo que no lo deja en paz.

CON EL DOLOR EN LA VOZ

"Quiero darle las gracias a quienes le quitaron la vida a mi hijo porque al menos me dejaron su cuerpo para darle cristiana sepultura y tener un lugar a donde llevarle una flor e irle a llorar"; las palabras apenas pasan por el nudo que se ha formado en la garganta de Rosa María Villegas, madre de Ricardo de Jesús Esparza Villegas.

Dos de sus hijas la flanquean, ha acudido a la rueda de prensa convocada por las autoridades de la UdeG para dar avances del caso; una tristeza invisible la ronda y ella intenta vencerla con la palabra, buscando la verdad.

"A mi hijo le quitaron la vida y quiero alzar la voz para que ninguna madre esté sufriendo lo que yo estoy sufriendo (...) no tengan miedo de hablar, somos aztecas, tenemos sangre de lucha, somos mexicanos y no debemos permitir que se mate a nuestros seres queridos impunemente".

Yadira López, una de sus hijas, insiste: "no tengo que decirles que mi hermano era bueno y se esforzaba, eso lo sabemos, lo que quiero es que nos apoyen para armar este rompecabezas, hay mucha gente que estuvo en el Cervantino y lo que no vio uno lo vio otro; sólo armando ese rompecabezas sabremos lo que le pasó a mi hermano", indicó.

Fuente: La Jornada| Por Juan Carlos G. Partida, corresponsal| Raúl Torres / Corresponsal| El Universal