domingo, 15 de noviembre de 2015

“¿En dónde están las autoridades y la ley”, cuestiona Iglesia tras destrucción de ejido en Coahuila

Rubén Moreira, gobernador de Coahuila. 
Foto: Eduardo Miranda

SALTILLO, Coah.- Debido a la impunidad y corrupción que se vive en el estado, el empresario Salvador Kamar, dueño de medios de comunicación, intenta tomar tierras que no le pertenecen a “punta de pistola”, denunció hoy la Iglesia católica en una carta sobre la destrucción de un ejido en el municipio de Cuatro Ciénegas.

La misiva, distribuida por la Diócesis de Coahuila, destaca que un conflicto agrario -que es uno más de los que abundan en todo el territorio nacional- desnuda la cruda realidad que se vive en el estado.

“El miércoles 4 de noviembre, entre la una y las siete de la tarde, hombres armados, liderados por los abogados del empresario monclovense Salvador Kamar, sometieron a los pocos habitantes que en ese momento se encontraban en el ejido Gabino Vázquez, perteneciente al municipio de Cuatro Ciénegas”, precisa el texto.

Agrega que tras someter a los campesinos, los pistoleros prendieron fuego a las casas de madera que, dispersas por la llanura, quedaron reducidas a escombros. Además, con maquinaria destruyeron las casas construidas con adobe.

Con un bulldozer, llevado en la plataforma de un tráiler, también destrozaron la paredes y los techos de lo que fueron el centro de salud, la capilla y una bodega, propiedad de la Coordinación del Plan Nacional de Zonas Deprimidas y Grupos Marginados (Coplamar).

Para las autoridades estatales, el conflicto agrario es un “simple pleito entre particulares”, subraya la misiva que se entregó a proceso.com.

Con esas palabras expresadas por el gobernador de Coahuila, Rubén Moreira, se abre el paso a la impunidad y la corrupción.

“La falta de autoridad, la falta de justicia y la falta de voluntad política para resolver éste y otros conflictos, nos arrastra al grado de llegar al uso de la fuerza y de la violencia ejercida por quien se cree con el derecho de tomar unas tierras que no le pertenecen, a punta de pistola”.

“La ausencia de un Estado de Derecho, la mala impartición de justicia, la impunidad, el desdén y la arrogancia de las autoridades, han permitido que cada vez haya más personas que quieran hacer justicia por sus propias manos, y ejerzan la ley de la selva en pleno siglo XXI”, destaca el texto.

Menciona que se equivocan quienes piensan que esto ya acabó: “La violencia engendra más violencia. Y si hoy afortunadamente no tenemos vidas que lamentar, poco faltó para que las tristes escenas de mujeres y hombres asesinados, linchados o desaparecidos, hubiesen sido noticia, una vez más, en nuestro México, tan dolido por la injusticia y por la miseria”.

La misiva cuestiona: “¿En dónde están las autoridades, en dónde las leyes, en donde los cuerpos de seguridad encargados de hacer guardar el orden, la paz y la concordia?”

“Las cínicas respuestas no hacen más que demostrarnos la clase de hombres que nos gobiernan mientras el pueblo arde en llamas: no pasa nada”, es un simple pleito entre particulares. Así que ya lo sabes: si tienes pleito con tu vecino, ve y quémale la casa; al fin que no hay nada ni nadie que te lo impida, ni ley que te lo repruebe, ni autoridad que te persiga y castigue por el mal que has hecho”, concluye la carta de la Iglesia católica.

Fuente: Proceso| JUAN ALBERTO CEDILLO