miércoles, 18 de enero de 2017

Para febrero entrarán mil migrantes al día a México, advierte ONG

Lo que temen las organizaciones civiles de apoyo a migrantes es que el gobierno mexicano se enfrente a una crisis migratoria que lo lleve a controlarla con mayor represión donde se están quedando no sólo centroamericanos, sino haitianos, africanos y ahora cubanos,


Para el coordinador Sur Sureste del Movimiento Migrante Mesoamericano, Rubén Figueroa, la amenaza de Donald Trump de construir un muro en su frontera sur no detendrá a los migrantes centroamericanos y considera que en la segunda semana de febrero entrarán mil migrantes por día al país. 

“Lo que estamos avizorando en el campo, en la ruta migratoria, es un incremento del flujo migratorio, el cual se empieza a dar para la segunda semana de febrero, de Centroamérica hacia México con rumbo a Estados Unidos”, comparte el activista al sumarse a las marchas que se realizarán el 20 y 21 de enero tras la toma de protesta del presidente de Estados Unidos. 

Asegura que los migrantes centroamericanos salen de sus países por la situación de violencia y pobreza que enfrentan, la cual no cambiará con la construcción de un muro, por lo cual seguirá habiendo un éxodo de El Salvador, Honduras y Guatemala.

“Lo que nosotros sí vemos, y con mucha preocupación, es que el gobierno mexicano podría utilizar a los migrantes centroamericanos como moneda de cambio para tratar temas comerciales con Estados Unidos”, comparte Figueroa.

Señala que lo que temen las organizaciones civiles de apoyo a migrantes es que el gobierno mexicano se enfrente a una crisis migratoria que lo lleve a controlarla con mayor represión, principalmente en la frontera norte, donde se están quedando no sólo centroamericanos, sino haitianos, africanos y ahora cubanos, tras la decisión del gobierno de Estados Unidos de poner fin a la política “pies secos, pies mojados”.

“El gobierno mexicano lo pudiera hacer para tener una presión hacia Donald Trump. No consideramos que estaría defendiendo a los migrantes en la mesa de diálogo, y esto nos hace pensar que sí estaríamos enfrentando una crisis de lado mexicano con respecto a los migrantes centroamericanos y los mexicanos deportados”, agregó.

Figueroa recordó que Barack Obama fue el mandatario que más deportaciones realizó durante su administración, 2.8 millones, casi la misma cantidad que promete Donald Trump; el activista asegura que serán principalmente centroamericanos. 

“De llegarse a dar, incrementarían deportaciones hacia Centroamérica, el 70 por ciento aproximadamente de los que deportaría serán de esa región. Y si el gobierno mexicano tiene que controlar el flujo como tal, se prevé una crisis muy grande”, concluyó.

Fuente:  Anabel Clemente, El Finaciero.